Déjalo ser... fluye (Dormingo)

A mi amigo Víctor Ardura,

porque todo va a estar bien.

Déjalo ser, dijeron los Maestros, y dijeron bien. Sólo déjalo ser, porque todo lo que necesitas es amor… Déjalo ser, que es eterno, como el campo de fresas. Y mira, como Lucy, tras esos ojos de caleidoscopio cómo todo tiene tonalidades y colores y formas y contornos y sabores y degustaciones y olores y aromas y texturas y sentidos y sensibilidades y miradas y olfatos y gustos y sonidos y tactos y maridajes e identidades distintas, diferentes, diversas. Déjalo ser y sé tu: fluye.

Como buen discípulo de mi Sargento Pimienta, te lo digo: déjalo ser y fluye. Porque, no lo olvides, el amor llega así de esa manera: sin hora ni fecha en el calendario… y así, también, se va.

Déjalo ser y fluye, no te interpongas en tu propio camino: no lo hagas más sinuoso de lo que es. Sólo fluye, date cuenta que tienes venas.

Déjalo ser y déjalo que te fluya. Lo demás, es lo de menos.

(Dormingo para ser leído como fue escrito: con una de tinto Shiraz del nuevo mundo del sureste australiano y escuchando irremediablemente no a los Maestros, sino al Maestro Gary Moore con su magistral “King of the Blues” que me obsequió el Maestro Oh-Video!... para mayor y mejor referencia, véase: www.youtube.com/watch?v=8ZiQ3Q749cc)